Cambio de temporada: cuida y guarda tu ropa

Para la gente de los lugares mas fresquitos o la que no ha tenido tiempo de hacer el cambio de temporada en la casa, aquí os dejo algunos consejos para organizarse a la hora de hacerlo.

 

 

Colchas, abrigos, complementos... Sigue nuestra guía para guardar de lo más pequeño a lo que más abulta. Son los mejores trucos para cuidar y ordenar tu ropa, y que el año que viene la encuentres ¡lista para usar!
Lo ideal es contar con un armario específico para el cambio de temporada, aunque si eso no es posible, hazle un hueco en las zonas más inaccesibles del resto de armarios de la casa, como altillos o canapés bajo la cama. Como se trata de prendas voluminosas, hay que prever el espacio que ocuparán: si las guardas demasiado aplastadas o en mala posición pueden deformarse o arrugarse. Es fundamental guardarlo todo limpio y protegido, en fundas o cajas (evita las de plástico). Es el mejor modo de protegerlo de las polillas.
Truco: Enrollar es un buen modo de guardar lo más voluminoso. Así no quedan las marcas de los pliegues.

Organiza 
tu armario en tres zonas

1. Arriba
En un armario exento de 210 cm de alto, destina los 30 cm superiores para guardar edredones y mantas en fundas de tela.
2. En la barra
A unos 170 cm, tiene la altura ideal para ser accesible. Cuelga trajes y abrigos también protegidos (en 70 cm de ancho caben 12 perchas).
3. Abajo
Destina los 40 cm inferiores del armario a zapatos y botas
 en cajas o en baldas extraíbles. Si es una zona cerrada, mejor: evitarás olores.

Bolsos: Evita que pierdan su forma

• Vacíalos bien antes de guardarlos. Si son de tela, ponlos en la lavadoraa con un programa de ropa delicada. Los de piel, nútrelos con una crema incolora.
• Rellena los bolsos rígidos de piel para que no pierdan su forma. Puedes hacerlo con bolas de papel o tela, o bien con otros bolsos blandos dentro. Así, optimizas el espacio.
• Mételos en cajas. Elígelas grandes, de unos 40 x 40 x 20 cm. Si tienes muchos, vale la pena que destines un pequeño auxiliar, como un baúll, para guardarlos.

Los zapatos en cajas y con horma

Guárdalos limpios y con sus hormas y te durarán más tiempo en buen estado. En Home in Order tienen hormas adaptables de cedro que, además, es un repelente natural de las polillas. También puedes poner papel de periódico en la punta para que conserven su forma. Puedes guardarlos en su caja original o comprar cajas iguales e identificarlas con dibujos, fotografías, etiquetas...

Guarda la alfombra en tres pasos

1. Enróllala.
Extiéndela y enróllala con papel de seda.
2. Átala.Con una cinta o un poco de tela para evitar que se desenrolle y ocupe más.
3. Protégela.
Con una funda (puedes hacerla con una sábana) y guárdala en horizontal.

Chaquetas y abrigos en fundas

Llévalos a la tintorería antes de guardarlos para eliminar roces y restos de perfume. Se trata de prendas pesadas que necesitan una buena percha (mejor de madera que metálicas). Para evitar que se “desboquen”, guárdalas con los botones abrochados. Cada abrigo o chaqueta debe contar son su propia percha y su funda para protegerlos del polvo.

En las barras: Perchas iguales y resistentes

• Las perchas.
Elígelas iguales, quedan a la misma altura y sacan más partido al espacio al adaptarse entre ellas. Estas son de Home in Order.
• Las fundas.
De tejidos que transpiren para evitar la humedad, como lino y algodón. Las de traje miden 100 cm de largo y las de abrigo 140. También hay fundas a media altura “cubrehombreras”.
• Organízate.
Pon las prendas más largas en los extremos, así despejas la parte inferior para cajas. Para diferenciar la ropa de él y de ella, puedes combinar fundas de dos colores.
Truco: Aromatiza con lavanda. Corta pequeños tallos y ponlos en bolsas de lino o algodón. Es un buen antipolillas.

Calcetines y medias en bolsas de tela

Agrupa los calcetines por un lado y medias y leotardos, por el otro. Luego, sepáralos por color: lisos y estampados en el caso de los calcetines, y claras y oscuras para las medias. No los dobles demasiado (ocupan más) y guárdalos en bolsas de tela hasta el año siguiente.
Truco: Rellena bolsas de tela con pequeños trozos de tiza o de cedro y colócalas en armarios y cajones para evitar la humedad.

Edredones: Doblados o enrollados y en fundas

• Lava en casa: Los edredones de plumas y mantas con un programa delicado. Pon los rellenos de plumas a la secadora con unas pelotas de tenis para evitar que se apelmacen.
• Dobla bien: Guarda las mantas dobladas en cuadrado y en una funda. Enrolla los rellenos para que pierdan un poco de aire y protégelos en su funda.
• Duplica el espacio: Firmas como Howards comercializan bolsas especiales que con la ayuda del aspirador envasan la ropa al vacío. Reducen su volumen más de la mitad.

Para mantas y colchas: un traje a medida

En una funda de lino o en una caja de algodón de lino. Se adaptan al tamaño del armario y de la colcha doblada. Son transpirables y pueden apilarse.

Los complementos 

Como gorros, bufandas y guantes, también ocupan un espacio valioso. Lo mejor es que los agrupes por tipo y destines una caja para cada uno de ellos. Antes de guardarlos, lávalos con un programa para lana y prendas delicadas. Sécalos extendidos sobre una toalla, porque colgados en el tendedero se deforman. Opta por cajas de tela o cartón, favorecen su transpiración y evitan la humedad, e identifícalas para saber qué tienes guardado.
Truco: Las cajas redondas son ideales para guardar cinturones. Enróllalos unos dentro de otros.